Tres opciones: hacer lo que quiero, lo que debo o sentarme a pensar.

Siguiendo con el cine como tema principal en este blog, casi como un escape de tanto fútbol, ayer agarré en cinemax o en cinecanal, no recuerdo bien…una película preciosa…que cuando vi a Natalia Oreiro, la actriz de telenovelas argentinas pensé que sería para cambiar de canal…pero me quedé a ver…al rato salió Norma Aleandro y Héctor Alterio, y me comenzó a entretener y al final me quedé para ver el final.

La película era Cleopatra, el título no es muy comercial, ni muy llamativo pero mi (poca) experiencia me dice que los títulos no son la película…con elementos comunes a una road movie, un deseo trasgresor de las protagonistas a lo Thelma y Louise y la comicidad de un guión para la gran Norma Aleandro, quien interpreta magníficamente a una argentina que, marcada por un nombre grandioso, conoce un día a una famosa actriz de telenovelas argentinas.

Cleopatra está llena de sentimientos y de emociones que muestra cómo la vida de una mujer madura cambia por el deseo de vivir, se escapa de la vida rutinaria al lado de un marido que ha perdido las ambiciones y la vitalidad; mientras que la joven actriz huye de un productor que la maneja como un producto comercial. Entre ambas surge una empatía y un deseo recíproco de ayuda que las lleva a emprender un camino sin destino y con final prorrogable. Alejado de cualquier posicionamiento dramático, Eduardo Mignogna evita cualquier tipo de sentimentalismo poniéndose al servicio de un guión ágil, fresco y muy divertido que muestra a una mujer fuerte capaz de enfrentarse positivamente a todas las situaciones.

Cargado de anécdotas y personajes que se encuentran por el camino, el viaje de Cleopatra es un viaje interior imparable. La banda sonora tan rotunda como divertida la acompaña en un proceso purificador en el que descubre sus necesidades reales de una manera que se presenta como natural. La planificación, los encuadres y la estructura se acoplan a la historia con sencillez, sirviendo dócilmente al guión, sin complicaciones ni riesgos. Una película divertida para pasar un buen rato.

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Acá una escena del comienzo...no es la más representativa, pero no encontré más.

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